El pobre Wall-E anda un poco tristón porque no le hago demasiado caso últimamente, así que después de darse un chapuzón en la playa, se puso a hacer equilibrios. Quién hubiera dicho que un pequeño muñeco de plástico pudiera ser todo un artista ¿verdad?
[ Efix: Canon EOS 30D · 50mm · f4.5 · 1/250s · ISO 100 ]